Sándwich de secreto ibérico con salsa picante y puerro crujiente

Hola de nuevo,

Como bien sabéis el blog siempre coge vacaciones en verano. Durante estos dos meses aprovecho para investigar, leer, aprender y preparar recetas originales para la nueva temporada. Este año os dejo una “recetaca” que os va a crear una necesidad máxima de poneros a cocinar y os dejará seguro un buen sabor de boca.

Hoy preparamos: “Sándwich de secreto ibérico con salsa picante y puerro crujiente”

Ingredientes

  • Pan de sándwich. El que más os guste, yo usé un pan abriochado que compré online pero os puede valer cualquiera que os guste.
  • Secreto ibérico. En mi opinión no pondría más de 100-150gr de carne en cada sándwich, pero si os gustan los sándwiches XXL no seré yo quien os prive de ello.
  • 1 puerro mediano
  • Queso cheddar. Yo lo compré en láminas.
  • Yogurt, preferiblemente griego. El que sea griego hace que la salsa resulte más cremosa pero podéis usar natural o incluso Kefir.
  • ½ limón
  • Polvo de chile, cayena, gochugaru… Cualquier picante en polvo nos vale.
  • Sal
  • Pimienta negra
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Mantequilla

Elaboración

  • Lo primero que haremos será prepara el puerro. Para ello ponemos en un cazo o en una sartén pequeña un dedo de aceite a calentar.
  • Picamos el puerro en juliana finita.
  • Cuando el aceite esté caliente, añadimos el puerro y dejamos que se dore. Tener cuidado porque al haberlo cortado finito en menos de un minuto lo tendréis listo.
  • Cuando esté dorado lo sacamos a un colador para escurrir el exceso de aceite. El aceite sobrante, no se tira. Es ideal para usar en un sofrito o en un puré ya que retiene un poco del sabor del puerro.
  • El siguiente paso será preparar la salsa. En un bol mezclamos dos cucharadas soperas de yogur griego por cada sándwich que vayamos a hacer.
  • Añadimos el zumo de medio limón si vamos a hacer de 2 a 4 raciones. Si hacemos más raciones os aconsejo añadir un poquito más de zumo o probar para ver si os parece correcto con sólo medio. La salsa nos debe quedar con un toque ácido.
  • Salpimentamos la salsa y añadimos picante en polvo al gusto.
  • Removemos para integrar todo bien y reservamos.
  • A continuación vamos a preparar la carne. Para ello ponemos una sartén con un chorrito de aceite de oliva a calentar. Se puede usar un poco del mismo aceite que nos ha sobrado de freír el puerro.
  • Cuando el aceite empiece a humear añadimos la carne. Podéis añadir el secreto entero o a tiras. Yo lo puse a tiras para conseguir un exterior crujiente en cada bocado y un interior jugoso. El que humee es importante porque así conseguiremos que se dore la carne rápidamente por el exterior y los jugos queden dentro.
  • Cocinaremos de 1 a 2 minutos por cada lado. No nos interesa que se cocine mucho por dentro para que quede jugosa la carne.
  • Una vez listo, retiramos a un plato y salamos. Es mejor si usamos sal en escamas pero no es imprescindible. Reservamos.
  • El último cocinado será el pan. En la misma sartén que hemos usado para hacer el secreto pondremos un taquito de mantequilla por cada ración de pan que vayamos a tostar.
  • Dentro del pan vamos a meter la lámina de queso. De esta manera, al calentarse el pan mientras se dora, el queso empezará a fundirse.
  • Cuando la mantequilla empiece a chisporrotear, siempre a fuego bajo-medio, añadimos el pan y doramos por un lado. Si vuestro pan es como el mío, de tipo abriochado, veréis que enseguida se carameliza. Doramos 2-3 minutos por cada lado.
  • Ya sólo nos queda montar el sándwich. Abrimos el pan por la mitad, que tendrá el queso fundido, y metemos la ración de carne. Añadimos la salsa por encima al gusto y por último el puerro a modo de topping.
  • Sólo os queda disfrutar de esta maravilla, y del verano que se nos viene encima. Volveré en septiembre para daros mucha hambre y gula.

Hasta pronto!

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