Arroz frito de huevo y salchichón con alitas de pollo agridulces

Hola de nuevo!

La receta de hoy es receta con estrella. Ya he puesto por aquí alguna receta de Dabiz Muñoz y esta es otra de ellas. Claro está que es una receta que está “apañada” por mí, porque no tengo todos sus ingredientes por casa. He de avisaros que no es difícil, aunque sí un poco laboriosa, pero que no se os quiten las ganas porque sobre todo es muy muy sabrosa.

Hoy preparamos: “Arroz frito de huevo y salchichón con alitas de pollo agridulces”

Ingredientes (2 personas, plato único)

  • 400 gr de arroz bomba (yo usé arroz SOS)
  • 600 ml de caldo de pollo (yo lo compré ya preparado)
  • 8 alitas de pollo
  • 3 ajos
  • 50 gr de jengibre fresco
  • ½ vasito de vino fino (la receta original usaba vino amontillado, pero yo encontré más fácil/económico un vino fino)
  • ¼ vaso de nata para cocinar
  • 70 gr de salchichón
  • 3 huevos
  • Piel de 1 limón
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal
  • Maicena
  • Cebollino
  • Azafrán
  • Aceite de sésamo
  • Soja
  • 1 bote de “salsa agridulce XO” — 250ml. Es una salsa creada por Dabiz Muñoz que se puede comprar en el Club Gourmet del Corte Inglés. Vale unos 3 euros y merece la pena probarla. Si no queréis compararla estáis en vuestro derecho y podéis usar una salsa agridulce cualquiera, el resultado no será idéntico, pero no importa ya que lo importante es disfrutar comiendo y perder el miedo a la cocina.

Elaboración

  • El primer paso es precalentar el horno a 220ºC con calor arriba y abajo.
  • Comenzamos preparando el arroz. Para ello ponemos en una perola grande y baja (apta para el horno) un chorrito generoso de aceite de oliva. Queremos que sea baja y grande para que la capa de arroz no sea muy gorda.
  • Agregamos los 3 ajos enteros (os recomiendo darles un golpe con la parte plana de un chuchillo para abrirlos un poco, sin llegar a chafarlos enteros) y cocinamos en la vitro a fuego medio.
  • Cuando empiecen a dorarse los ajos, agregamos el arroz y removemos bien. Poco a poco los granos se irán tornando a color nácar (como trasparentes).
  • Una vez tengamos el arroz “nacarado” agregamos ¼ de vaso de vino fino y dejamos evaporar el alcohol un par de minutos.
  • Después agregamos los 600ml de caldo de pollo, el jengibre pelado y cortado en 4 trozos (luego lo retiraremos así que no nos interesa picarlo fino para encontrarlo antes) y sal al gusto.
  • Cuando rompa a hervir, lo tapamos con papel de aluminio asegurándonos que no se escapa el vapor y meteremos al horno a 220ºC durante 18 minutos que ya tendremos caliente.
  • Cuando pase este tiempo, sacamos del horno la perola y retiramos el papel de aluminio. El arroz estará cocinado, aunque el grano estará un poquito duro en el centro. Nos interesa que se quede así, para que se termine de cocinar cuando lo friamos.
  • Lo traspasamos a otro recipiente para enfriarlo más rápidamente, lo tapamos con papel film tocando el arroz (así no se resecarán los granos de la superficie). Reservamos mientras enfría. Si lo hacéis en invierno, sacarlo a la ventana o al balcón y si no a la nevera. Esta parte puede hacerse con anterioridad y guardar el arroz en la nevera.
  • El siguiente paso es preparar la salsa agridulce de las alitas. Para ello verteremos los 250ml de la salsa agridulce en un cazo, pelamos el limón con ayuda de un pelador para que sólo nos salga la piel (no queremos lo blanco de la cáscara) y picamos la cáscara en juliana.
  • Cocinaremos la salsa junto con la cáscara unos 10-15 minutos a fuego medio, hasta que veamos que la salsa espesa y la cáscara se pone blandita. Esto también lo podemos hacer con anterioridad y tenerlo refrigerado. En el momento de utilizarlo, podéis darle un calentón en el microondas o en un cazo y listo para que se vuelva algo más líquida.
  • Por otro lado, debemos preparar las alitas. Para ello cogeremos cada alita y la partiremos en las 3 partes del ala. Desecharemos las puntas y nos quedaremos con los otros dos trozos.
  • Vamos a cocinar las alitas al vapor, para ello no necesitamos una vaporera (¡aquí no hay excusas!). Si tenéis una vaporera pues genial, cocinar unos 18-20 minutos y listo. Si no tenéis yo os explico cómo montaros una casera. Cogemos una cacerola alta y pondremos 2 dedos de agua en ella, colocaremos un escurridor encima (el típico que se usa para escurrir la lechuga), y encima del escurridor pondremos la tapa de la propia cacerola para que no se pierda el vapor.
  • Cuando el agua rompa a hervir y se empiece a evaporar colocamos las alitas por el escurridor intentando no amontonarlas (colocar por las paredes) y tapamos. Cocinamos 18-20 minutos. Es importante que el escurridor no toque el agua y que pongamos suficiente agua para que en todo momento se esté creando vapor.
  • Una vez estén cocinadas las alitas, les vamos a cortar los dos extremos de los huesitos que tienen para poder deshuesarlas sin destrozarlas. Con ese tiempo de cocción las alitas estarán ya listas y será sencillo quitarles el hueso. Para quitarles el hueso basta con girarlo un poco sobre sí mismo agarrándolo de un extremo y luego empujarlo hacia afuera de la alita.
  • Colocaremos las alitas en un papel absorbente para quitarles el exceso de agua que puedan tener por haberlas cocinado al vapor.
  • Todo este proceso de las alitas, también se puede hacer con anterioridad, guardando las alitas deshuesadas en un tupper hasta el momento de utilizarlas en la receta. Anterioridad = a la mañana de antes o al día anterior, no una semana antes.
  • Hasta el momento tenemos arroz, salsa agridulce y alistas litas. Empezamos ahora a hacer el arroz para la comida/cena. Los siguientes pasos sí que se deben hacer en el momento.
  • Primero marinaremos las alitas. Para ello en un bol colocamos 1 huevo, ¼ de vaso de vino fino, ¼ de nata para cocinar y 2 cucharadas soperas de maicena. Removemos bien con las manos hasta que no haya grumos, añadimos las alitas y las impregnamos bien de la mezcla. Dejamos reposar 10 minutos.
  • Lo siguiente que haremos será poner aceite a calentar a unos 160-180ºC. En mi fuego no es máxima potencia, si no potencia 7 de 9.
  • Cuando el aceite esté listo, sacamos las alitas de una en una de la mezcla, escurrimos y las pasamos por maicena dejando una fina capa. Os aconsejo que lo hagáis de una en una para que cojáis la cantidad justa de maicena, si las dejáis reposar sobre la maicena absorben mucha cantidad.
  • Freímos en el aceite hasta que estén doradas y retiramos a un papel absorbente. Hacemos los mismo con todas.
  • Preparamos ahora el arroz frito. Para ello cascamos 2 huevos en un bol con unas hebras de azafrán (vale con 7-8 hebras, y vale saltarse este paso también que el azafrán barato no es…). Batimos muy poco, no nos hace falta que esté batido como para tortilla.
  • En una sartén amplia, ponemos un chorrito de aceite de oliva a fuego bajo-medio. Cuando empiece a calentarse el aceite agregamos los huevos batidos con azafrán y removemos sin parar. Queremos que el huevo se quede meloso, que no llegue a cuajarse.
  • En ese punto, agregamos el arroz (quitándole el ajo y el jengibre que habíamos usado para aromatizar) y comenzamos a remover sin parar. Trataremos de que el huevo cubra cada grano de arroz con una fina película, de ahí que necesitemos el fuego bajo, para que no se cuaje muy rápido el huevo.
  • Cuando veamos que el huevo ya está bien distribuido por todo el arroz, agregamos el salchichón picado en finos tacos (cubitos de medio cm) y un chorrito de aceite de oliva y seguimos removiendo. Ahora subimos el fuego al máximo porque queremos que el arroz comience a tostarse, pero no dejamos de remover.
  • Cuando veamos que el arroz está empezando a tostarse añadimos un chorrito de aceite de sésamo y un chorrito de salsa de soja. Seguimos removiendo enérgicamente. Buscamos que la soja se tueste un poquito.
  • Por último, cuando el arroz esté listo agregamos el cebollino picado finamente, removemos y retiramos del fuego.
  • Para acabar, pasaremos cada alita frita por la salsa agridulce creando un recubrimiento al rebozado crujiente y las iremos colocando encima del arroz para presentar junto con un trocito de piel de limón cocinado (he intentado que se vea en la foto lo mejor posible).
  • Espolvoreamos si queremos un poquito más de cebollino picado y listo para comer.

Hasta la próxima!

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